¿QUÉ ES EL ESTRÉS? ¿CÓMO NOS AFECTA? ¿SE PUEDE REGULAR?
La primera referencia al término estrés surge en 1936. En aquel año la revista Nature publicó un artículo titulado "A Syndrome Produced by Diverse Nocuous Agents," El autor fue Hans Selye del departamento de bioquímica de la universidad de Montreal en Canadá.
Un error hizo que en este artículo se presentase al mundo el vocablo estrés. Strain es un término usado en ingeniería que se refiere al agotamiento que sufren los materiales con el uso. Dice la leyenda que el doctor Hans Seyle, austriaco, en sus primeros años en Canadá no dominaba bien el inglés y entendió que strain se escribía stress.
La confusión del doctor provocó que el mundo de la ciencia incorporarse la nueva palabra, y Seyle se hiciese, de manera involuntaria, un nombre en la historia.
Si revisamos el (estudio) vemos que Selye definió estrés como "Un síndrome producido por diversos agentes nocivos que provocan una respuesta adaptativa del organismo". A esa respuesta adaptativa la denominó «Síndrome general de adaptación» y la dividió en 3 etapas.
1.- Alarma de reacción: el cuerpo detecta al elemento estresor.
2.-Fase de adaptación: el cuerpo desarrolla una respuesta a la presencia de ese elemento estresor.
3.- Fase de agotamiento: por la duración y/o el nivel de intensidad el cuerpo comienza a perder su capacidad de respuesta ante dicho estresor.
¿CÓMO NOS AFECTA?
Más de 80 años después, los modernos métodos de análisis científico parecen darle la razón al Doctor Seyle. Numerosas investigaciones demuestran que, una vez entramos en contacto con un elemento estresor, el metabolismo comienza a liberar hormonas del estrés. Si el estresor sigue operando por más tiempo (por ejemplo, un jefe impertinente al que tenemos que ver a diario) el cerebro sigue secretando hormonas del estrés, sobre todo, cortisol. Se ha visto esto en pacientes diagnosticados con depresión.
Sonia Lupien es una de estas autoridades a nivel mundial en el estudio de este tema. En su libro Well Streseed: manage stress before it turns toxic, explica que "El estrés es como el azúcar, no es intrínsecamente malo, de hecho es necesario en ciertas dosis. Pero si abusamos....nos podemos volver diabéticos y eso sí es un problema".
¿SE PUEDE REGULAR?
Por fortuna en estos momentos existen numerosas soluciones avaladas científicamente para gestionar el estrés. Hay básicamente dos posibilidades.
Tratamientos no farmacológicas: Técnicas de respiración, meditación, mindfulness (estudio) el yoga o los tratamientos psicológicos ha demostrado sobradamente su eficacia. Son las más eficaces si se utilizan de manera preventiva en las primeras etapas del problema. Aprendiendo ciertas técnicas tendremos posibilidad de mantener nuestros niveles de estrés en rangos saludables.
Terapias a base de fármacos: Cuando el estrés se ha cronificado la química cerebral puede verse alterada. Para corregirlo existen diferentes tratamientos destinados a regular los niveles de hormonas del estrés que nuestro cerebro produce.
Es importante que estas soluciones lleguen a los ciudadanos de manera que se pueda generalizar el uso y sobre todo que las personas afectadas por esta patología sepan cómo identificarla y actuar en consecuencia.